celebra hoy.
Es un día más.
No hablaré de los reproches que
ambos tenemos de cada uno,
(somos tan iguales),
ni haré mención de tu frustración
por desaparecer las arrugas en tu rostro,
(si se notan, pero no las odies,
te sientan bien),
y mucho menos escribiré de lo mucho
que me frustra tu obsesión por
el ejercicio,
(pero agradezco que te cuides).
Hoy, siendo un día más de la existencia
te doy gracias.
No hace falta decir de qué.
Pues no tienes que hacer más, ni hacer
menos para sentirte amada.
(eres fuerte, eres especial, ya lo eres todo
y lo eras todo antes de mi)
Te amo madre,
como te he amado y te amaré cada día
que has sido y seguirás siendo la primera
mujer en vida...