En increíble como todo puede cambiar en un instante, todo deja de tener sentido, incluso el viento sopla diferente, esa sensación acalambrada que pasa por tu frente, vibra por tus párpados, la sientes en tu paladar, y sin darte cuenta..., ya no eres el mismo, el niño deja de ser niño para convertirse en hombre, y el hombre deja de ser hombre para convertirse en viejo..., luego el proceso se repite, y vuelves a ser niño..., te das cuenta de cuantas cosas en tu vida has pasado por alto, haces memoria de cada una de las emociones y decepciones que pasaste, que sufriste (que disfrutaste); todo..., no hay más, ¿Qué sigue?, no lo sé... (tal vez si...); la vida es corta, un lapso en donde defines quien quieres ser, donde, por algún motivo, tienes que demostrar ser alguien, debes (no debes), hacer saber a todo el mundo ¡Que estas ahí!, ¡Que tienes algo que te hace diferente a cualquier otra persona en el mundo!..., ¿Por qué?, al parecer nadie lo sabe, (solo tú mismo)...; Dicen que tres cosas marcarán tú vida, "los libros que léas", "las decisiones que tomes", "y los amigos que elijas", ¡Quién lo decidió!, alguien que dejo su marca en este mundo, alguien, que se atrevió a decir lo que pensaba sin tener miedo a los demás..., tan solo "alguien" que por alguna razón, no es igual a nadie más...; ¿Estoy loco?, no lo sé..., ¿Hablo solo?, en ocasiones..., ¿No estoy cuerdo?, (tal ve sí...); ¿Qué importa?, mucho..., ¿Quién lo decidió?, solo yo pude haberlo hecho, nadie más, esa es, o puede llamarse, "consecuencia"; aquello que ocurre cuando el mundo desea regresarte lo que has hecho..., "destino", tan solo es la manera elegante para decir "excusa"; "miedo", ¿existe?, si, (no sé), tal vez solo en las personas que tienen el "valor" para creer tanto en él que se convierte en realidad...
Hoy lo sé, hoy no lo sé..., todo es raro, confuso, exasperante..., tal vez un poco insulso o incluso taciturno..., ¡No se puede describir a la vida!, ¡No se puede describir al tiempo!; insulso me despido, y tal vez un poco acérrimo de lo positivo..., tal vez no conjugué bien los verbos de mi alma, o sin querer omití las comas de mis pensamientos, más eso no cambia el hecho, de que hoy he descubierto lo más importante de existir; tan solo hay dos momentos en la vida de un ser humano, el momento en el que nace, y el momento en que escondido entre su escénica..., descubre porque lo hizo...